viernes, 23 de mayo de 2008

Memories

Intento enumerar las razones por las que mi vida siguió, pero la memoria me jugó una mala pasada esta vez. No las encuentro. Queda abierta toda posibilidad a cometer los mismos errores, pero no tan fácilmente, porque para que eso pase hay que hablar.
Hay que hablar y contarlo todo. No quiero. No quiero contarte. No quiero que me escuches. No me dejes hablar.
Sólo yo sé todo lo que hice cuando te esfumaste. Cosas que no debería haber hecho. Cosas que me cambiaron para siempre. Así estoy hoy, no puedo deshacerme de mi pasado ni mi presente, no puedo definir qué quiero o qué siento, y pierdo mis noches de sueño pensando en qué sería lo correcto...
No quiero lastimar ni salir lastimada, ya aprendí de eso. Solamente quiero vivir, en paz conmigo misma y el resto. Pero si hay algo que la vida me mostró es que no se puede realmente.
Te quiero, no puedo evitarlo. Pero hay más de una persona a la que quiero de esa manera. No puedo evitarlo.

Tal vez te necesito para salir de esto.
Tal vez me necesitás para salir de aquello.
Tal vez debería ayudarte a que no seas esa persona una vez más.
Tal vez podrías mostrarme el camino que perdí.
Tal vez tiene algún sentido que no hallas querido a nadie tanto como a mí.
Tal vez aprendí cuando me tocó sufrir tendría que haberme quedado ahí.

Una y otra vez en todo este tiempo estuvo la pregunta: "Qué hubiera sido?"

Tan sólo quiero volver a encontrar el equilibrio que tuve una vez, sentirme cómo me sentí, así de bien. Saber que hay alguien más, ser feliz por un momento y que el tiempo se detenga en ese instante.

Tal vez ahora te necesito de verdad.


Recuerdos de un invierno en tu cama.

No hay comentarios: